lunes, 19 de septiembre de 2011

De Tarapoto a Iquitos







El Día 11 de Julio, comienza nuestra aventura. La aventura comenzó en el propio hotel (La Patarhasca), cuando a las 7 de la mañana me voy a levantar las lumbares (lumbago), me dan un dolor que no puedo ni ponerme los calcetines. Ibuprofeno en seco y a ver que pasa.
Agarramos a las 8 de la mañana el bus para Yurimaguas, que son 127 Km por carretera asfaltada y..., cuando llegamos al puerto resulta que el barco que estaba anunciando su salida para este lunes 11 de Julio, no sale, lo hará el martes.
No hay problema, compramos pasaje de camarote, dejamos nuestras mochilas y vamos a comprar la hamaca, el tapex y los cubiertos, amén del agua para el viaje. Como soy bastante torpe con las manualidades, un empleado del barco, me ató la hamaca a los barrotes, le pagué como 30cts de euro, así tenía la seguridad de que no me caería.
Por ahora tengo camarote para mi solo aunque tenga dos mini camas. Calculamos en dos metros cuadrados la superficie del camarote.
Viajan también dos chicas andaluzas, que viven en Málaga y que acaban de hacer un seis mil en la cordillera Blanca. Mi camarote es el número cinco, y durante todo el viaje iré solo.
El chófer del bus de Tarapoto a Yurimaguas, cuando empezamos el trayecto nos dio a elegir: película, canciones o cómicos. La gente elegió película y nos tragamos una del Arnold Schwzerneger, que para mas inri ya la había visto el año pasado en el mismo bus. felizmente cuando acabó este héroe americano, nos pusieron un video con actuaciones en directo de Maná y disfruté.
Pasado el efecto del Ibuprofeno, busco en mi farmacia y veo que también tengo buscapina, todo vendrá bien.
Estamos tirados en el barco, viendo llover, leyendo, escribiendo, charlando,...A eso de las 7 de la tarde nos vamos al pueblo a cenar, a "La Olla de Barro", y así ver el Argentina- Costa Rica, que terminó con victoria de los primeros y una gran actuación de Messi.
Volvimos andando hasta el barco, porque la temperatura es muy buena, no hay mosquitos y además caminando cinco, tienen que venir a por nosotros por la menos seis.
Por fín el día 12 de Julio, a eso de las 2 del mediodía sonaba la sirena del barco indicando el momento de zarpar.
Para celebrar la salida, nos bebemos dos "tetrabric", de vino chileno que esta francamente bien. Las malagueñas, entienden un montón de vinos. Para las cinco de la tarde ya estamos cenados: arroz, y un poco de pollo. Subimos al tercer piso y charlamos con el capitán o armador del barco y así nos enteramos de que el GILMER V, tiene capacidad para 1.500 Tm y que en estos momentos llevamos de carga 900 Tm, incluidas 60 vacas vivas que van en la parte delantera del barco, en la plataforma, y para las cuales les han construido un pequeño corralito, con tablas de madera. De todas maneras estos bóvidos, pagan 100 soles cada una por pasaje.
La velocidad del GILMER V es bestial, 5 nudos la hora que son entre 9 y 10Km por hora (creo). Como desde Yurimaguas hasta Iquitos hay solamente 777 Km por el río, ya me contarás...
20 empleados tiene el barco, 8 de ellos encargados solamente de la mercancia: vigilar, cargar, colocar y demás. Una persona se encarga de mantener limpio nuestro piso, muy eficazmente.
El barco va navegando por una especie de "canal", que ya conocen, pero cuando el cauce se estrecha, o creen que los bancos de arena se han movido y hay peligro de encallar, una lancha rápida que va amarrada al barco sale con dos operarios y, con una vara, comprueban la profundidad en varios puntos, comunicándolo por radio al piloto para marcarle el camino.
No llueve, no hace frío, no hay mosquitos, pero... el atardecer no ha sido muy espectacular, de todas las maneras, hice varias fotos. Como hay luna llena, creo que navegaremos toda la noche sin detenernos.
El día 13 a eso de las 6 de la mañana, el Huallaga, se ha unido al Marañón, y ahora navegamos por este último, a la misma velocidad de 5 nudos.
El amanecer con tintes rojizos y amarillentos ha sido precioso
De los pueblecitos de la orilla hacen señas con un trapo blanco, y si hay carga, el barco se acerca y atraca, si solamente hay pasajeros con poca carga, la lanchita que va con el Gilmer, sale y trae a los pasajeros, lo mismo hace para dejar a otros.
Sigue el viaje silencioso, pues el barco no mete ruido. Cargan y cargan plátanos en los poblados de las orillas.
Yo leo "Pantaleón y las Visitadoras", porque la acción transcurre en Iquitos y es fácil de leer. La tarde transcurre monótona y plácida. La misma cena y la misma comida: arroz con... lo que sea. La cerveza del barco se terminó, y el agua tiene poco éxito. Yo compré 7 litros y me parece que me van a sobra 6 litros.
Como la lumbalgia no se me pasaba y estaba hasta el moño del ibuprofeno, tomo por mi cuenta la buscapina y a ver que pasa.
El barco con tanto plátano anda ya por las 1.400 Tm.
En un pueblito subieron unas vendedoras y pude volver a degustar el sabor de la "cocona", que tan bien hace mi suegra en Panamá.
El día 14 es nuestro último día de viaje. Nos hemos levantado a las 5 y media y hemos fotografiado el amanecer.
A las 6 llegábamos al pueblo de Nauta, y comienzan nuestras dudas, pués desde aquí podemos ir en autobús por una pista en la selva hasta Iquitos, y son solamente 2 horas.
Un poco por vagancia o por comodidad, decidimos seguir en el barco. Serán 8 horas hasta Iquitos.
A las 8 de la mañana, pasados unos pocos kilómetros de Nauta, el Marañón se junta con el Ucayali y, a partir de aquí ya se denomina Amazonas en los libros de texto. El viaje sigue siendo igual, pero más agua o más ancho el camino.
Por fín a las 3 de la tarde del día 14 llegábamos a la ciudad de Iquitos. Habíamos hecho 777km por río con el Gilmer V.
No tuvimos mayores problemas al bajar, y eso que una gran cantidad de gente está esperando al barco en el puerto para subir y bajar las pertenencias de los pasajeros que deseen a tierra, pagando claro, hay que tener cuidado porque también cogen las pertenencias de los que no desean que se las bajen.
Fuimos raudos al hotel "La Casona " y... estaba completo. Empezábamos bien. Sin perdida de tiempo fuimos a otro llamado El Rincón Cauchero y... fantástico, con habitaciones con aire acondicionado y televisión por cable.
Esta noche cené ceviche y luego me apetecía tomar un pisco sawer. Había un café que ofertaba 2 x 1, eso que los ingleses llaman el Hapy Houers o algo parecido. Estuve dudando, pero salio el empleado y me dijo que por 12 soles, 3 euros, me daba dos. Yo le contesté que estaba solo y no me apetecía mucho. No te preocupes me dijo, allí hay también uno que esta solo. Me senté donde él, comenzamos a hablar y... era el marido de Mila Ojer una chica de Sangüesa, que vive aquí. Casualidad de las casualidades.
Creo que ya teneís bastante crónica para seguir con vuestros mapas. Beste egun arte (hasta otro día). Daniel

2 comentarios:

Gerson Grind Noise dijo...

Muy buena las viajes...soy de san paulo pero estoy en Belém hace dos años mi hijo nascio aqui y me esposa es Paraense,un abrazo perfil face www.facebook.com/gerson.vieira.359

Gerson Grind Noise dijo...

Hola Amigo muy buena su história y por ser maestro...hizo una aventura por la Amazonia...es linda demasiada,oque gostó de Belém?ajajaj creo que sí un Abrazo y cuando volver contactame