jueves, 26 de noviembre de 2009

JODHPUR


Nuestro ultimo día en Udaipur, no ha estado mal. Tomar una cerveza fresca al la orilla del lago, mientras escuchas a Chambao, es un pequeño placer, pero Udaipur, no da mas de si. Aquí es para venir en pareja y saborear cervezas a la luz de las velas contemplando el lago y el Lake Palace.
El hotel estaba bien ( Kumbha Palace), y la joyería de mi amigo también. Lo mejor de Udaipur, ha sido su agradable temperatura, y los paseos por las callejuelas .
Nos vamos en bus a Jodhpur.
Por la mañana tempranito a la estación, un café con galletas saladas y a la "cafetera".
Era un bus con 24 asientos y literas para viajar de noche, supongo que corresponderían a los asientos, no lo sé. Pues bien, como era de día, nosotros teníamos los asientos 17 y 18, pero las literas la usaban gente que no compraban billete en taquilla, y la capacidad de capacidad de dichas literas con indios, casi era ilimitada, por lo menos 7 en cada una.
En el bus, iban cambiando los personajes, a nosotros nadie nos movió y después de 5 horas, llegamos a Jodhpur. La primera parte del recorrido, fue sorprendente pues discurrió entre montañas y con un paisaje totalmente verde. Es en la segunda parte, cuando se vuelve árido y desértico.
Vinimos al Gopal Guest House, que es una casa familiar donde alquilas las habitaciones mientras ellos hacen la vida en el pasillo interior de la casa y duermen o en la terraza o en dicho pasillo.
La habitación estaba bien, con fotos de recuerdos de los tiempos de la dominación inglesa, y algunos juguetes infantiles. El precio fue genial, 2 euros por persona.
Luego todo ha consistido en callejear, sobretodo alrededor de la torre del reloj, que es el centro neurálgico de la ciudad. Aquí había un gran mercado callejero , supercolorido . La mercancía era de lo mas sencillo, pantalones, cuentas de colores, brazaletes de plástico, hasta había dos puestos de hilos y agujas.
También aquí había poliomelíticos , que montaban el "numerito". Uno, estaba tumbado en mitad de la carretera, y giraba sobre si mismo como si fuera una salchich., A cada vuelta, empujaba el plato donde esperaba recaudar dinero. Unos pasos mas adelante, su compinche, un tipo con muletas al que le faltaba una pierna. era el encargado de "parar" el plato hasta que llegaba el otro. Todo esto entre gritos y chillidos. ( No le atropelló ningún coche).
El otro "polio", estaba calle abajo, y tenía las dos piernas vendadas, totalmente abiertas como si hiciera eternamente el "spagat". Avanzaba apoyado en su culo, reforzado con un trozo de neumático. A este casi había que echarle dinero, pues en esa postura, ocupaba toda la calle, como en la canción infantil de " a tapar la calle, que pasa mi.... "
Un mundo cruel el de los poliomelíticos, pero es parte de este mundo que hay en India.
El día 7 de agosto, lo dedicamos en su totalidad a ver el Fuerte. Fantástico , Grandioso.
Yo no soy de ver estos monumentos, pero este es diferente. Pese a que tienes que pagar 300 Rp, unos 5 euros, no decepciona. A la entrada te dan junto con el tikek
un "audio-guía", y puedes seguir a tu ritmo todas las explicaciones sobre cada uno de los rincones del fuerte cuantas veces quieras, basta con darle al numero que marca dicho
rincón. En español, claro está. Aunque también puedes coger en chino o japonés.
Por la tarde pasear, hablar con un tipo que me vendió un cargador de baterías Sony, y a cenar al Kalinga. Es importante, allá donde vayas encontrar un buen restaurante, y este lo era. La cerveza estaba fresquísima, y el chiken tandoori, aunque les costó sacarlo, estaba sabroso.
Hice algunas compras, como camellos (de cuero) para los amigos, al por mayor, sin posibilidad de regateo y a descansar que mañana nuevamente en autobús, vamos para Jaissalmer, donde dicen, hace un calor terrible. Pues ya se sabe: agua, cerveza, y hotel con A/C.
Cuando después de preparar las mochilas, subíamos a la terraza a desayunar, nos hemos juntado con 4 aragoneses que venían de Jaissalmer, y nos han dado la dirección del hotel donde han estado. Uno no llevaba bien el turistear por India, sobretodo por la suciedad. En Jodhpur, el alcantarillado va canalizado por fuera y claro huele, pero es India, no la Plaza del Pilar.
Agur. Daniel

martes, 24 de noviembre de 2009

UDAIPUR


A las 6 de la tarde en un ricksow llegamos a la estación de Nizam, algo alejada del centro de Delhi.
En la vida de la estación, está la "otra India", no tan pulcra como la que habíamos visitado.
Viajamos en 2 A/C. Segunda clase con aire acondicionado, junto con otras 6 personas, 5 hombres y una señora mayor. Con uno de ellos he intercambiado el billete para poder ir mas cerca de Luís.
Nada mas entrar en el compartimento, los indios se ponen cómodos quitándose los zapatos ( la señora también). Cada uno pasa el tiempo a su manera, la señora leyendo , otros manejando el móvil, y uno de ellos, sacó el ordenador portátil y se puso a trabajar. Habría zona Wifi o como se llame en el vagón, pero esto para que veaís los cambios que se van produciendo en este país.
Antes de joven, viajaba en 2 Sleeper. Que era segunda clase, con tres tablas a cada lado del compartimento para dormir. Unos ventiladores pequeños en el techo que solían funcionar a golpes de zapato, y mucha gente durante el día. Había 6 lugares por la noche, pero durante el día, se levantaba la tabla del medio, hacía de respaldo y en el banco entraban unas diez personas mínimo .La tabla era dura y no tenias nada mas. Ahora, en 2 A/C, te dan manta ( que la necesitas), una sábana y una almohada, además son 6 plazas día y noche, no se mete mas gente, y..., el aire acondicionado funciona. Nos vamos aburguesando un poco.
El viaje fué en estas condiciones placentero. Dormimos toda la noche, y tampoco tuvimos una gran preocupación por las mochilas, visto las personas que compartían nuestro vagón.
Después de 12 horas de viaje , nos plantamos en Udaipur.
En Varanasi, nos habíamos juntado en los Ghates, con seis chicas vizcaínas, allá por los primeros días de julio, que venían rebotadas del Rajastán. Que si hacía un calor insoportable, que si en Udaipur se había secado el lago, que las temperaturas eran de unos 40 grados ,que si la deshidratación, etc, etc etc.
Llegamos a Udaipur y...una temperatura fresca y agradable. El lago tenía bastante agua y la figura blanca del Lake Palaz ( uno de los mas lujosos de India ), destacaba entre las mismas.
Por la noche a cenar a la luz de las velas ( Luís y Yo ), en uno de los hoteles que rodean el lago, como si estuviéramos en Venecia. Esto es mucha tranquilidad. Luís fue a ver el palacio del Maharaja. Yo no, ya lo había visto en viajes anteriores y además ahora cobraban: por entrar, por llevar cámara, por ver las joyas, por guía, por...Todo tikes diferentes. Yo lo que hice fue callejear e ir a la joyería de uno de mis amigos indios.
Udaipur se ha convertido así como Katmandú , o Pokhara en una ciudad para turistas. Casi todo gira alrededor del lago y del Lake Palace. Multitud de hoteles , Internet, agencias de viaje ,y tiendas para satisfacer la demanda de los "turist"
Aquí se rodó la película de Octopussy del agente 007, y ahora en varios hoteles la reponen todas las tardes.
Todo esta cambiando, nosotros también. El que quiera ver esto, que se de prisa, mas tarde las principales ciudades indias serán un Benidorm a lo grande, eso si , los indios son simpáticos y excelentes vendedores.Mañana en autobús, nos vamos para Jhodpur. Última etapa antes de Jaissalmer. Agur.

viernes, 20 de noviembre de 2009

REGRESO A DELHI


Todo el día viajando. 13 horas para hacer 600 Kilómetros y llegar a Agra.
Pasamos por Luknow, una inmensa ciudad en la que están haciendo unas obras salomónicas. Construyendo templos, y una especie de murallas en los accesos a la ciudad, increíblemente grandes.
El chofer, no se como ( igual fue por la inyección económica del día anterior) aguantó hasta Agra
Aquí veníamos a tiro fijo, pues ya conocíamos el hotel. Una gran ventaja, pues llegar a la noche a una ciudad y ponerte a buscar, es un palo agotador .Agra ha sido nuestra área de descanso hacia Delhi. Pasamos dos noches, sin ninguna cosa especial que reseñar. El Tourist Rest House ( nuestro hotel), estaba casi lleno, y el dueño dirigiéndose a mi, me dijo, que como, con la experiencia que tengo y las veces que había estado en ese hotelno lo había reservado por teléfono o por email. Todo en tono amble y cariñoso, complementado con una palmadita en el culo ( el tipo era un poco de allá..), que hizo que al día siguiente nos cambiaran de habitación con aire acondicionado. Hay que pasar por todo y con alegría.
Mis amigos visitaron el Red Fort y les gustó mucho. Desde allí hay unas bonitas vistas al Taj ( esta enfrente).
Mientras ellos hacían las visitas "culturales", yo visitaba la tienda de Levis en busca de una camisa que me estaba volviendo loco pero que no tenían mas que la talla M y me quedaba pequeña.
Como lo de la cámara digital es un gran invento, fotografié la camisa, por delante, por detrás y puesta, para ver si ese mismo modelo lo encontraba en Delhi. Mi búsqueda en Calcuta y en Alahabad, había sido infructuosa, y ya casi estaba dispuesto a comprármela aun sabiendo que me estaba pequeña y que iba a tener reprimenda de Maricruz.
Desvelo la intriga de la camiseta . ¡ en Delhi había!.Enseñé las fotos y..., me la trajeron y la compré. Alguna vez os la enseñaré, o vereís las fotos.
Nuestra última etapa, fueron 200 Km. 4 horas nada mas de viaje, mas 1 hora de entrada a la ciudad hasta el hotel.
Al final, como me temía, el chofer, que dos días antes me mostraba agradecimiento eterno y amistad sin límites, me miraba con cara de pocos amigos ante la propina que le dábamos. Las 1.500 Rupias, hasta completar las 4.000 que nos habíamos propuesto entregar.
No me extrañó su postura, por haber tenido experiencias parecidas en otros viajes anteriores, pero te queda un "poso" de decepción.
Desaparecido ya el chofer y el coche, nos preparamos para nuestra última etapa, El Rajastan. Txiki y Mari Carme, ya se han ido para Navarra, y solo quedamos Luís y Yo.
Como ambos ya pasamos de los 50, no era cuestión de andar como aventureros en la jungla del asfalto de la estación de tren de Delhi, para conseguir billetes. Fuimos a una agencia ( Metrópolis), al lado del hotel, y por 50 Rupias más por la gestión, compramos los billetes para Udaipur y también para la vuelta desde Jaissalmer. Esto lo hace, la edad y que ya habíamos cobrado el mes...
El domingo por la mañana fue el día de la "marquesada". Ángel el médico, siempre me ha llamado " el marqués frustrado" pues un día en el viaje tiendo a tener ramalazos de "marqués".
Pues bien, nos fuimos al Imperial Hotel a desayunar. Sijs sirviéndote, mucho casco con plumas, señoritas asiáticas de recepcionistas, tiendas de Chanel, y todo el lujo que quieras imaginar .El desayuno fue bufe, pero volvimos a comer baicon, pan de verdad, jugos de todo tipo, croisants, salchichas y huevos, y así hasta casi reventar. Además, manchabas un poco el plato y te traían otro, te levantabas y luego te "corrían" la silla para sentarte. En fin, nos sentimos ricos por dos horas.
Pero ya Delhi, esta lleno de turistas. Se nota que hemos entrado ya en agosto.
Hoy hemos viajado en el Metro. Una maravilla, aunque hay importantes medidas de seguridad como detector de metales, cacheos por la policía y un parapeto de sacos llenos de arena, con un soldado con fusil, dentro de la estación.
Aunque parezca aparatoso al contarlo, la verdad es que no han sido muy molestas las medidas y el Metro estaba super limpio, ordenado y muy bien organizado. Esa " corte de los milagros" que pululan por cualquier calle de India donde se acumula gente no existía en el Metro. Nadie durmiendo ni pidiendo. No sé como lo han conseguido.
Luego cuando regresé al hotel, estuve esperando a mi sobrina Maider, que venía de Barcelona.
Estuvimos un rato hablando, y ella con su amiga hacen un recorrido de una forma, mientras Luís y yo seguimos nuestro camino que..., empieza hoy con el tren hacia Udaipur. Daniel

martes, 17 de noviembre de 2009

EN TEORÍA EN NEPAL


El día de nuestra partida, sorprendentemente no salió lloviendo y la temperatura era agradable, pero no se podían ver los Anapurnas.
No pudimos ir directamente a Sonauly ( puesto fronterizo ), porque la carretera estaba cortada. Tuvimos que retroceder 90 kilometros hasta el cruce con la carretera de Katmandhu, y luego enfilar la bajada hacia India.
Muchos pasos por pueblos pequeños, donde nos obligaban a parar y pagar una pequeña cantidad por pasar por el pueblo, vaya, como los "arbitrios" antes en Navarra. Al final acabas un poco harto.
El chófer RAJ, iba nervioso. Pensaba que no nos iban a dejar pasar porque en sus papeles para la estancia en Nepal, ponía que habiamos pasado por otra frontera y no sabía si teniamos que regresar por el mismo paso.
El caso es que llegamos a la frontera de Sonauli ( antes habia sido Raxaul a unos 100 km de alli),entregó el papel de las taxas nepalís sin salir del coche y..., poco a poco para adelante sin parar,y, sigue y sigue, y yo haciéndole señas para que parara ,y él, sigue y sigue hasta..., la frontera India. En ese momento, se pone a cantar de alegria y darnos la mano y todo eso. Nos señaló tambien donde estaba el puesto de policía , y allí nos dirijimos. Sin aparentes problemas,nos estamparon el sello de entrada a India, pero es que..., no tenemos el sello de salida de Nepal.Con la preocupación de RAJ, pasamos el puesto de policía sin parar. Oficialmente aún no hemos salido, estamos en Nepal. Bueno, ya veremos si hay problemas en el aeropuerto de Delhi, al salir. Esperemos que no,porque el sello de entrada lo tenemos a India.Ademas Txki y Mari Carmen, se van ya el dia 3, y... ellos nos contaran.
El caso es que después de este episodio de paso de frontera, llegamos bastante tarde a Gorakpur. Un pueblo sin mucha historia y que solamente suele ser lugar de paso para los turistas que se dirigen o bien a Delhi, o bien a Nepal.
Aqui tiramos de guia, y fuimos al hotel Bobina, que lo estaban reconstruyendo y todo era pintura y polvo.El caso es que tras un duro regateo nos quedamos a dormir. Mari Carmen con su asma, pasándolo mal.Fuimos a cenar a un restaurante cercano y.., le pedimos una botella de cerveza, que casi como de extranjis y con mucho cuidado nos la trajeron. Estaba muy fresca y deliciosa, pero ya no hay San Miguel, como en Nepal.
Cuando regresamos al hotel, RAJ me comentó que ya no tenía dinero. Nosotros pensabamos darle unas 4.000 Rupias de propina al finalizar el viaje. Son unos 60 euros.El caso es que vista la situación, le anticipé 2.000 Rp, diciéndole que el resto, las otras 2.000, se las dariamos en Delhi, al finalizar el viaje.
Al poco rato, me llamó aprte, me cogió la mano, la puso en su corazón y con lágrimas en los ojos ( él ), me dijo que su amistad conmigo iba a ser eterna ( algo asi entendi), y más cosas que mi inglés no llegó a captar.
Le dejé,y se lo comenté a mis amigos. Al dia siguiente, sin venir mucho a cuento, me pido 500 Rupias para echar gasoil al coche. Se las dí claro está, pero se las descontaré de las 2000 del final del viaje.
Saludos desde Agra y.., ya falta poco para acabar esta parte del viaje. Luego empieza otra distinta. Agur. Daniel

POKARA


Increíble, lleva 24 horas seguidas lloviendo torrencialmente. Mis amigos se fueron para hacer triking.
El chófer me ha dicho que la carretera entre Katmandhú y Pokara, está cortada por desprendimientos y que cuatro personas, han desaparecido haciendo rafting. La luz también se va cada 2 por 3 y han hecho su aparición los mosquitos. Prácticamente todo el día 27 sin salir del hotel, me vi hasta una película en inglés, haber si así voy perfeccionando el mío .Pese a todo le eché valor y por la mañana fui a caminar. Valor no, fue imprudencia, llegué al hotel hecho una sopa y eso que llevaba impermeable. Da igual eso del impermeable, al final a montar "tenderete" y a esperar a que se seque.
El día 28 amaneció con los mismos signos y cuando volvía de Internet , ( después de un buen breesfast, me encuentro con que mis amigos habían acortado un día su expedición y ya estaban de vuelta. La lluvia, las sanguijuelas y el no poder ver el paisaje, pudieron con ellos.
Como al mediodía escampó, me decidí a dar una vuelta hasta donde termina el lago. Hoteles y Guest House, por todas partes. En uno de ellos venía un menú en un perfecto castellano.
La gente pescaba entre los arrozales y los torrentes de agua que bajan de las montañas próximas. Capturaban una especie de angulas, además las cogían en bastante cantidad .Bordeando el lago, por la carretera, iban las parejas de novios en moto, haciendo alto en cualquier curva del camino con vistas al lago, bajaban y se contaban confidencias. Y es que las mujeres nepalíes han cambiado mucho. Tanto en Katmandhu, como en Pokara, van muy bien vestidas, maquilladas y preocupadas por su físico. La mayoría viste ropa moderna, oséa, pantalón vaqueros y blusa. Con sus parejas van montadas en las motos estilo europeo, una pierna a cada lado, no como en India. Antes no era así en Nepal ,pero ..., todo cambia una barbaridad.
Hay cantidad de turismo asiático, europeo hay muy poco y entre los asiáticos, parece que se lleva la palma los japoneses, pero también hay chinos; chinos de Hon Kong , de Saigón, tahilandeses, vietnamitas y demás. A mí todos me parecen iguales, además los japoneses van en pareja, no ese grupo tan característico de antes.
Por la tarde, no ha llovido y hemos aprovechado para pasear, pues la temperatura aquí es excelente, no como el calorazo que estaís pasando por allá.
Me voy a ir de Nepal, sin ver sus montañas, pero no me decepciona, porque en otros viajes también me pasó lo mismo. En época monzónica es muy difícil verlas, de todas las maneras, mañana me levantaré a las cinco, como he hecho hoy y.., luego me volveré a la cama. Namaste. Agur. Mañana volvemos para India

jueves, 12 de noviembre de 2009

NEPAL


Tres noches en Katmandhu, han sido suficientes. Nada que ver con la antigua capital nepalí. Ahora es una macrociudad y que solamente vive del turismo. Si antes fue del, de montaña, ahora es el turismo de grupos organizados, cuya ansiedad es comprar y ver un par de templos. Yo salí muy poco del barrio de Tamel, donde teníamos el hotel. Muy bueno por cierto, el Tibet Guest House, yo creo que regentado por tibetanos, que tuvieron un comportamiento espléndido. ( Ya lo conocía de otros viajes).
El viernes decidí, reencontrarme con mi pasado y traté de ir caminando hasta Pasupatina ( lugar de cremaciones). En mi gesticular ingles-nepalí, fui preguntando y..., conseguí llegar. Hay que tener en cuenta que desde el hotel, habría unos 7 Km. Por el camino se me rompió la sandalia y me volví un poco loco para encontrar un zapatero callejero. Lo encontré en una acera , claro está y mientras cosía, pegaba, clavaba y todo eso, me abrió un paraguas para que no me molestara ...el sol.
Me lo paso, "pipa", viendo trabajar a estos artesanos, y normalmente no les regateo ni una rupia del precio que me piden.
Cuando llegue a Pasupatina, me pedían 500 Rupias por entrar. Me dí media vuelta y traté de entrar por otro lugar. Me pillaron y me hicieron dar la vuelta. Aun así conseguí hacer tres o cuatro fotos a los crematorios. Había tres cadáveres "ardiendo", pero no se concentraba gente a su alrededor. Los encargados de la cremación se refugiaban bajo el porche del templo que hay al lado.
Después de un ratillo de olor a carne quemada y viendo que ya no tenia nada más que hacer allí, emprendí el camino de vuelta. Esta vez en taxi, porque ya había conseguido mi propósito que era encontrar el lugar por mi mismo y hacerlo a pie.
De vuelta en el hotel, siestecita, ver el tour y descansar. Cuando vinieron mis amigos, me contaron que habían contratado un taxi para hacer una vuelta por el valle de Katmandhu, y que aunque les había gustado, les fastidiaba tener que pagar por todo. Visitar Bagdahon, solamente la entrada al pueblo, costaba 10 dólares por cabeza. Quizás por ello propusieron abandonar al día siguiente Katmandhu y venir hacia Pokara.
No me pareció mal, hice algunas compras, ( me faltaba el cuchillo de Marcelino), y preparar la mochila para el día siguiente.
Nos vinimos a Pokhara, con la ilusión de ver los Anapurnas , pero..., estaba jarreando como no lo había hecho nunca. De todas las maneras, estos tres, han salido para hacer una caminata de dos días cara al Anapurrna. Yo me quedo tranquilamente, en un café en frente del hotel, donde hay una cristalera con unas vistas al lago increíbles. No me mojo, y ayer me pusieron música de Manu Chao. Espero que sean la cinco de la tarde que hay eso hoper hours o algo parecido, vaya que por el precio de uno dos, o sino como ayer, pizza y una cerveza de litro 150 Rupias que son un euro y medio. Ya me contaran su experiencia mis amigos cuando regresen. Sigue lloviendo a mares.
No se ve nada de las montañas, y eso que a las cinco de la mañana me he subido a la terraza del hotel para poder divisar algo, y nada. Mañana lo intentaré de nuevo. Namaste Daniel

viernes, 6 de noviembre de 2009

CAMINO A KATMANDHU.


Horrible la carretera de Budhgaya a Patna. Como si fuéramos en una batidora,. 3 horas para hacer 90 Kilómetros, y no había atascos, ni que pagar taxas ni nada. Los pueblos, feos y muy sucios.
El resto de carretera hasta la frontera nepalí, ha sido mucho peor. No es que fueran baches de vez en cuando, era todo socavones, mas o menos profundos. Era imposible, tratar de evitarlos. Fueron, unas 8 horas, de un lado para otro, tratando de evitarlos, cuando era imposible. Claro, también pinchamos. Esto era lo normal, lo anormal, fue que no pincháramos más veces.
El paso de frontera, fue por el mítico Raxaul ( la primera frontera ,entre India y Nepal, por tierra, allá por los 70 y que además habrá que cruzar en rikshaws.
Ahora es una oficinita, de nada, que tienes que adivinar donde es. Allí los indios, sin problemas te estampan el sello de salida. Después recorres un "tierra de nadie "y otro cuartico, te indica que es la oficina nepalí. Allí obtuvimos la visa de entrada,( 25 dólares(, y el funcionario, con gran ceremonial, nos entregó los pasaportes. Teníamos vía libre para 15 días en Nepal. Una vez acabado este trámite, el aduanero, en vista de que había sido muy eficaz, nos dijo, que si teníamos un obsequio para el. Ingenuos de nosotros, miramos en las mochilas, y le sacamos, un abanico (de plástico y un subrayador fosforito). El tipo, no sabia si reirse o quitarnos los pasaportes. Todo se aclaró cuando dijo, que el obsequio era " money", le dimos 20 dólares y quedo encantado. Ya en terreno nepalí, cenamos muy bien, con. una cervecita San Miguel, por barba. Ahora toca aclararse con los euros, los dólares, las rupias indias, y las rupias nepalís. Un batiburrillo operacional.
Ah! El funcionario nepalí, le preguntó al chofer haber quien del grupo hablaba inglés, y el chofer le contestó que Luis, y Yo. Le tendré que dar una propina cuando termine el viaje por ponerme entre los hablantes de la lengua de Shakespeare, sin tener ni idea.
En Nepal, por todas partes te piden dinero. En la frontera, entrando en los pueblos, los maoístas para la causa,..., así todos. Quizás es porque el coche con el que vamos es indio, y van a por ellos.
Llegamos a katmhandú. El paraíso de las compras, o , un gran mercadillo. Tiendas por todos los lados, pero no de grandes marcas sino de piedras preciosas, ropa, pinturas, música, instrumentos musicales, en fin de todo.
La capital ha crecido enormemente, pero la infraestructura para soportar semejante crecimiento, no. Hay una contaminación increíble, En muchos lugares ( de la capital), la basura se echa a la calle, y mucha gente va con mascarillas. Pero, hay un barrio, llamado Tamel, dedicado solamente a los turistas, donde hay buenos restaurantes, hoteles, mas o menos limpieza, música, y todo eso.( es donde nosotros estamos, claro esta )
Hoy hemos venido a Durwar Squar, plaza mítica, donde está el palacio de la Kumarys ( niña diosa), y un montón de templos. Era por donde campaban los hippys, poniéndose morados de marihuana. Ahora, tendrían que pagar por estar por estos lugares que antaño fueron la meta de un camino de búsqueda, allá por la década de los 60.
Namaste. Daniel